Opinión de «Lily y las criaturas de la noche» de Nick Lake

Sientes rabia porque tienes que ir al hospital muy a menudo y echas de menos tu vida de antes.

Crees que el nuevo bebé te sustituirá y eso te enfada.

Te sientes culpable porque les dijiste a tus padres que no los querías ver nunca más.

Ahora unas oscuras criaturas de la noche los han remplazado y se han apoderado de tu casa. Pero…

NO ESTÁS SOLA.

Cuatro sabios animales te acompañarán en esta aventura.

NO ES TU CULPA.

El amor que tienes dentro podrá salvar a tu familia.

ERES VALIENTE.

Mucho más de lo que crees…

ENTRA.

 

*Traducción de Gemma Rovira.

Lily se ha quedado en casa de su abuela mientras sus padres están recibiendo al nuevo bebé de la familia.

Ese bebé que, según piensa Lily, solo llega para sustituirla, para ocupar el lugar de hija «no defectuosa» que ella perdió cuando le diagnosticaron su enfermedad crónica. Esa enfermedad que le obliga a pasar tanto tiempo en el hospital, recibiendo pinchazos y escuchando el pitido de las máquinas. Esa enfermedad que ha hecho que sus amigas se alejen de ella. Esa enfermedad que la ha vuelto débil, vulnerable e incapaz de hacer cosas que antes le resultaban fáciles.

¡Pero no piensa permitirlo! No va a quedarse allí parada mientras sus padres tienen al bebé.

Así que, en cuanto cae la noche, Lily se escapa y vuelve a su casa, con la intención de encontrar la nota que su madre dejó sobre la mesa de la cocina, para descubrir dónde han ido y reunirse con ellos.

Sin embargo, su casa ya no parece su casa. Está toda oscura. Y dentro hay unos seres que se parecen a sus padres, pero no lo son. Están hechos de algo oscuro y sus ojos son como trozos de carbón.

Ayudada por un cuervo, una topa, un ratón y una serpiente, Lily no tendrá más remedio que enfrentarse a esas temibles criaturas para tratar de derrotarlas, recuperar su casa y salvar a su familia. Sobre todo porque lo que está ocurriendo es culpa suya. Porque lo último que les dijo a sus padres antes de marcharse con la abuela fue que no quería al bebé y que tampoco quería volver a verlos a ellos…

¡Qué maravilla de libro! Emocionante, inquietante, emotivo… Me hizo sentir tantas cosas que acabé llorando. Y yo no soy de llorar con los libros.

A primera vista, Lily y las Criaturas de la Noche puede parecer una novela infantil de fantasía. Una aventura con un toque oscuro que recuerda a Coraline o El viaje de Chihiro. Y por supuesto que lo es. Lily, desde luego, vive una gran aventura, llena de peligros, acción y un poquito de «magia».

Pero, entre líneas, el libro es mucho más. Es un complicado viaje de autoconocimiento y aceptación, durante el que Lily va aprendiendo a valorar las cosas buenas que tiene dentro y las que le rodean, pero también a recoger las cartas malas que le han tocado en el reparto de la vida y a convivir con ellas del mejor modo posible para así poder seguir adelante. La evolución que tiene la protagonista a lo largo de las páginas es tremenda y muestra que, a veces, una misma realidad puede ser muy distinta en función de cómo la afrontemos.

Los personajes animales que acompañan a Lily juegan un papel muy importante, no solo a nivel de trama (pues la guían y ayudan durante la aventura), sino también a nivel narrativo, ya que el autor se sirve de ellos para nivelar la tensión e incluso aliviar un poco los momentos más dramáticos salpicándolos con un golpe de humor.

En general, la pluma de Nick Lane es muy envolvente, te hace sentir que estás dentro de la casa, que estás rodeado de toda esa tensión oscura. Pero al mismo tiempo es ágil y cercana. Me ha gustado mucho.

La edición del libro (editado por Blackie Books) es preciosa y trae ilustraciones en blanco y negro de Emily Gravett, que refuerzan ese aura tétrico, turbio e inquietante que envuelve a la historia.

Lily y las Criaturas de la Noche de Nick Lake me ha parecido una novela middle grade compleja y apasionante, en la que una niña aprende a procesar lo que está ocurriendo en su vida, a través de una aventura de fantasía oscura y acompañada por cuatro animales llenos de sabiduría.

Cinco estrellas y me apunto al autor para seguir leyendo su obra.

—Opinión de Inés Díaz Arriero—