OPINIÓN DE SEXO SENTIDO DE JOEL ANGELINO

La obra sigue la ruta del génesis y da inicio con un diálogo entre Adán y Eva a través de los muñecos de un titiritero, a partir de allí vemos un desfile que continúa una anciana muy particular, un Sexólogo, un niño, un payaso, un ser «inclasificable», en suma son ocho personajes ideados por Joel Angelino para crear el elenco inolvidable que conforma este desternillante trabajo.

Sexo sentido de Joel Angelino es un espectáculo muy original que navega entre las memorias, vida y pensamientos de su protagonista y creador.

Es una obra de teatro repleta de creatividad, originalidad, sencillez y diversión que nos invita a dejarnos sorprender, a no dar nada por sentado, a no seguir la regla de los monólogos, ya que Joel Angelino nos deleita con su versatilidad.

Me desconcertó y a la vez, me gusto mucho no saber que parte era la que estaba en el texto y cuál era la improvisada.

Es un road trip emocional que empieza en Cuba y no sabes hacia donde nos va a llevar en cada parada. Creo que es sexo sentido para Joel, es una obra catártica y en donde el sexo, no es el hilo conductor principal de la obra, es una parte fundamental, pero si leemos entre líneas en muchos de los personajes de Joel Angelino os sorprendería su creatividad y su mundo interior.

Va de menos a más. Navega en muchas aguas y es divertido ver como nos muestra el sexo y sus distintas vertientes este actor.

Me divertí mucho cuando interactúa con el público de una manera muy cercana y hace que nosotros nos sentamos parte de la obra.

La vida es complicada, pero viendo sexo sentido me di cuenta de que nosotros somos los que rizamos el rizo de muchas maneras. Uno de los muchos pensamientos en voz alta que hace Joel, y que se me quedó grabada, es la forma en la que, muchas veces, pensamos que las personas mayores nos van a juzgar y son nuestro mayor apoyo.

El tiempo se pasa volando cuando estás metido dentro de la obra, pero me pasó lo contrario. Hay narraciones en las que me hubiese quedado más horas, mientras Joel nos contaba sobre sus tías abuelas, sobre Cuba, sobre alguna de sus amigas de Miami o de esos personajes que crea y te seducen.

Creo que empecé sin saber lo que iba a ver y de lo que se trataba sexo sentido, pero salí con varias lecciones de vida.

Una obra diferente y original. Un monólogo que no se puede catalogar y se sale de lo común, una apuesta arriesgada: que sale muy bien.