Tras conocer la intención de su hermano, el marqués de Somerset, de desposarla con un viejo noble, Elisabeth Alwood abandona el hogar de su familia en Londres dispuesta a embarcarse rumbo a Europa junto a su dama de compañía. De camino hacia Portsmouth, y con el fin de reunir el dinero necesario para el pasaje en barco, ambas se emplean temporalmente en el castillo de Greyswood, confiando en que sus propietarios se encuentren en Londres disfrutando del inicio de la temporada. Sin embargo, no todo sale como Elisabeth ha planeado. La misma noche de su llegada al castillo, el primogénito del duque, Robert, conde de Downey, aparece en él escondiéndose de su familia mientras trata de recuperar la vista, que ha perdido al participar en un duelo. Elisabeth, haciéndose pasar por una doncella del castillo, termina trabajando para él, un hombre malhumorado y enojado con el mundo que, a pesar de ello, no logra que ella ceje en su empeño de ayudarle. Por su parte, Robert descubre en la joven doncella un inesperado motivo para seguir convertirla en su amante.
Un buen motivo para mentir de Maia Clark me ha encantado. Estaba enfadada con la romántica histórica, pues todos los que empezaba a leer, los dejaba en la página cincuenta o cien, porque o la trama no avanzaba, porque la protagonista era insufrible, porque eran diálogos de besugos...
Pero, tenía desde que se publicó en mi kindle el finalista XI Premio Internacional Hqñ y sigo a Maia Clark en Instagram, así que en una de sus publicaciones se me encendió la bombilla y dije: Los ganadores y finalistas del Premio Internacional Hqñ nunca me han defraudado y empecé a leer.
Os puedo asegurar que es uno de mis mejores lectoras de este 2023 y de los mejores libros de este género que he leído.
He notado que la autora hace un pequeño guiño a Jane Eyre, pero no sé si me estaré equivocando. Los diálogos entre Elisabeth y Robert, si, Jane Austen estuviese viva o tuviese la ocasión de leer esta historia estaría feliz.
Un castillo como personaje silencioso, que sabe todo y que entre sus muros se va tejiendo una historia a fuego lento.
No todo es un camino de rosas para ninguno de nuestros protagonistas, ya que los dos deberán de aprender algunas lecciones juntos y por separado.
Mary/Elizabeth es de esos personajes femeninos que tienes miedo de que cambien y de que la novela se tambalee, ya que es el alma de la historia.
La otra parte de la trama es Robert y creo que se me metió bajo la piel, la primera vez que le escuché hablar.
Pensaréis ¿Cómo te puedes enamorar de un personaje? Es ficción, pero está tan bien descrito, sus pensamientos tan bien plasmados, su forma de ser tan camuflada por su percance, que ir descubriendo a este personaje fue una maravilla.
La tensión de toda esta historia puede que recaiga sobre los hombros de Elizabet y Robert, pero cuando hacen aparición los personajes secundarios, ¡Qué delicia! Si, ya que dan mucho juego.
Hace tiempo que no estaba perdida, es decir: En la mayoría de los romances históricos y contemporáneos se deshincha todo, casi por la mitad del libro, pero en un buen motivo para mentir, no.
Maia Clark ha sabido como mantener la tensión entre los personajes, ha sabido como meter más incógnitas, más sentimientos, más secundarios hasta el final.
Este libro es una montaña rusa de sentimientos descritos en palabras, en miradas, en silencios, en gestos. He ido suspirando con cada página que pasaba y he ido enamorándome más del estilo de la autora.
No sabría muy bien que decir, si me hacen elegir entre: Diálogos o descripciones, puesto que ambos se complementan a la perfección.
El estilo de la autora es ágil y aunque haya descripciones estas son necesarias para muchas de las escenas que vais a leer, ya que no os desvelaré nada, pero, un buen motivo para mentir se lee con los cincos sentidos.
Creo que sería una experiencia sensorial fascinante con audiolibro. Cerrar los ojos, mientras voy escuchando las palabras...Seguro que, si os habéis el libro, sabréis porque lo digo.
No había leído nada de Maia Clark y me he enamorado completamente de su pluma. Tengo muchas ganas de leer algo de ella, porque estoy segura de que me va a seguir cautivando.
Creo que, no os he hablado nada de la trama, pero la sinopsis desvela un poco de lo que va, pero el resto, os lo dejo a las lectoras y lectores. Porque os prometo que, la sinopsis solo cuenta el 10% de la historia.
Maia Clark y un buen motivo para mentir me han hecho reconciliarme con la novela romántica histórica.
No la dejaré de recomendar. Una novela con la que iba a ciegas y conforme me iba quitando la venda, me ha dejado con la boca abierta.
Recomendable al 100%
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