Welcome

Web cultural creada hace 12 años. Administrada por María Cabal e Inés Díaz Arriero. Hace 5 años se cambió el nombre (soycazadoradesombrasylibros) de este humilde espacio y se mudó todo el contenido a la web actual. Sabemos que todo cuesta tiempo, trabajo y esfuerzo, así que encontrarás opiniones realizadas con todo el respeto y educación del mundo. Entrevistas a personas de diversos ámbitos culturales, crónicas de eventos, etc. Somos un altavoz y colaboramos con diversas editoriales, productoras, instituciones, etc. No cobramos nada y todo lo hacemos por amor al arte y a la cultura, así que ¡Gracias por pasarte por nuestro humilde espacio y seguir Paseando a Miss Cultura. Logo del blog realizado por @Arandanity Brujas realizadas por @ReiRei_Mv

Slider

Opinión de La muñeca rusa de Fernando Lalal


El éxito de la publicación de la primera novela del rapero y youtuber Pibonacci no solo trajo satisfacción a su autor, sino también una demanda por injurias. Pero ¿qué relación guardaba la historia de un anticuario y un mentalista de circo, que era el argumento de la novela, con la fundación del imperio del demandante? En un trepidante juego de pistas, como esas muñecas rusas que esconden en su interior otra y otra muñeca, solo el juicio destapó finalmente la verdad tanto tiempo oculta.

 



Al abrir La muñeca rusa de Fernando Lalana, nos encontramos con Pibonacci, un rapero y youtuber de gran éxito, que se encuentra a las puertas de un prestigioso despacho de abogadas. ¿El motivo? Le han demandado por cometer un delito de injuria a través de su primera novela publicada, La montaña rusa, que, por supuesto, ha vendido miles y miles de ejemplares.

El joven no tiene muy claro de qué se le acusa, ni en base a qué, ya que aparentemente no tiene ni idea de quién es la persona que le ha demandado, pero, de todos modos, el juez ha ordenado el secuestro preventivo del libro.

¿Quién es el demandante? ¿Qué relación tiene con Pibonacci? ¿Son reales las injurias de las que se acusa al rapero? ¿Qué hay detrás de la trama de La montaña rusa, en realidad?

¡Cuántas preguntas! Y te prometo que todavía vas a encontrar muchas más. Yo al principio estaba alucinando porque no tenía ni la más remota idea de hacia dónde me iba a llevar la trama.

Y es que, a partir de ese inicio, la trama de La muñeca rusa se despliega en varias direcciones o, más bien, se abre como una muñeca rusa (ya nos avisó el título) haciendo que dentro de ella surjan nuevas tramas, con otras más en su interior.

¡La estructura es una pasada! Un libro dentro de otro libro, fragmentos del presente de algunos personajes implicados en el juicio, investigaciones paralelas que van dejando nuevas pistas que a su vez conducen a formular más preguntas.

Y es que, al final, el papel de Pibonacci parece lo de menos, casi una mera anécdota. Lo importante es su libro. Dentro de La muñeca rusa podemos leer capítulos de la novela publicada por el rapero y, a través de su trama, descubrir quién es el demandante.

Además, vemos las reflexiones de los abogados, del juez, de los detectives… que nos dejan todos ellos un montón de pistas acerca de qué ha pasado y qué relación tiene todo ello con el libro del rapero. 

Y todo termina encajando perfectamente en el juicio del final del libro. ¡A mí la resolución del misterio me pilló por sorpresa; no había conseguido adivinarlo del todo!

El estilo narrativo de los diferentes capítulos varía para adaptarse a lo que se cuenta en cada uno de ellos, especialmente a través de los diálogos, ya que están ambientados en diferentes épocas.

Además, para enriquecer todavía más esta estructura en forma de matrioska, a lo largo de las páginas aparecen cameos de varios personajes de otras novelas de Fernando Lalana.

Si que es verdad que personalmente no le pondría la etiqueta de novela juvenil, sino que la calificaría como novela corta. Esto no quiere decir que no la puedan leer lectores jóvenes, que claro que pueden y de hecho segurísimo que les engancha, sino que no he encontrado los ingredientes más típicos de este tipo de novelas.

No quiero contar mucho más, porque creo que lo mejor de este libro es leerlo sin saber demasiado sobre él. Reconozco que yo me metí de lleno sin haber leído siquiera la sinopsis, porque el autor ya era garantía suficiente para mí, y me bebí las doscientas páginas en un par de días, porque literalmente no podía parar de leer.

La intriga, el desconcierto de no saber muy bien hacia donde me dirigía y, sobre todo, la magistral estructura (¿he dicho ya que me ha fascinado?) me hicieron disfrutar una barbaridad de La muñeca rusa. ¡Qué gran lectura!

 

Opinión de Inés Díaz Arriero

 

Comentarios

  1. Pues pinta bastante bien, si se cruza me podría animar.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

La nueva politica de privacidad donde encontrarás información acerca de comentarios, entradas...https://blog.paseandoamisscultura.com/2010/09/Contactme.html

Pinterest

Write to

use the form below: