OPINIÓN DE ANIMALES INVISIBLES DE GABI MARTÍNEZ Y JORDI SERRALLONGA

Por las llanuras del Serengeti y las cordilleras vietnamitas, los glaciares de Nueva Zelanda, las aguas atlánticas o del Amazonas, e incluso el interior de tantas metrópolis —las occidentales también— corren historias de animales que casi nadie ha visto. Algunos son mitos. Otros, un recuerdo de seres que se extinguieron. Pero muchos aún están vivos. Animales invisibles es una exploración asombrosamente ilustrada de cincuenta y uno de estos referentes del mundo salvaje que continúan estimulando el imaginario y la realidad de millones de personas en todo el mundo. Una inédita y hermosa inmersión en algunos de los misterios que todavía resisten en el planeta. Una obra sobre la memoria, el futuro y las posibilidades de creer en lo que no se ve.

 

· Prólogo de Viggo Mortensen

Animales invisibles. Mito, vida y extinción es un viaje alrededor del mundo para visitar a medio centenar de animales que suelen mantenerse fuera del alcance del ojo humano, bien por su modo de vida o bien porque nos hemos cargado su entorno hasta hacerlos desaparecer (casi) por completo.

Desde el dodo hasta el unicornio, pasando por el puma, el elefante africano o el kiwi, el libro divide a los animales en cuatro grandes bloques, en función del estado en el que se encuentran: extinción, vida, mito y más vida. En cada uno de esos bloques, nos van presentado a una serie de animales, uno a uno, explicándonos sus orígenes, algunas curiosidades y su realidad actual o las circunstancias en las que desaparecieron, si es el caso.

Gabi Martínez es escritor de literatura de viajes y Jordi Serrallonga arqueólogo naturalista. ¿Qué mejor tándem para un libro así? Desde luego, el resultado es fantástico.

Todo el libro en sí es una delicia, desde las preciosas ilustraciones de cada animal, hechas por Joana Santamans, a los datos tan interesantes que se cuentan de cada uno de los animales. Pero lo que más me ha gustado es el modo en el que está narrado. Los autores nos hablan de cada animal, de sus experiencias para localizarlos, exponiendo datos científicos e históricos, pero de un modo tan bello y tan accesible, que casi parecen pequeños cuentos.

Ojalá algunos lo fueran y no hubieran sucedido de verdad.

Porque, por desgracia, hablar de animales extintos o de otros que se encuentran en estado crítico de conservación, la mayoría de las veces va irremediablemente unido a hablar de colonizaciones, de caza, de industrias agresivas, de contaminación, de calentamiento global y, en definitiva, de la huella destructora del ser humano.

En este sentido me parece muy importante que no solo se refieran a los animales, sino también a otras especies e incluso a humanos, a tribus indígenas cuyos modos de vida están al borde de la desaparición (o han desaparecido ya), con la enorme pérdida cultural que ello supone.

Otra cosa que me ha gustado mucho es que hayan decidido incluir el bloque de Mitos, con todo ese repertorio de criaturas pertenecientes al imaginario colectivo, y el papel fundamental que le otorgan a la curiosidad, a las tradiciones y a las creencias, pues, como se menciona en algún momento del libro, persiguiendo la imaginación también se pueden lograr triunfos para la ciencia gracias a hallazgos inesperados.

Animales invisibles ha sido una lectura preciosa, un viaje mágico que me ha transportado a distintos lugares del mundo, a diferentes momentos de la historia, para conocer un montón de animales sorprendentes y darme (más) cuenta de la gran riqueza natural y cultural que nos rodea, aunque no podamos verla a simple vista e incluso aunque nos empeñemos en destruirla.

Me parece un libro perfecto para regalar o para regalarse, para lectores curiosos, para cualquier amante de la naturaleza, de los animales y de los viajes.

—Opinión de Inés Díaz Arriero—