Lobías Rumin vive en Eldin Menor y, al contrario que el resto de sus habitantes, es un chico extraño y solitario. Pero la vida de Lobías da un giro inesperado en la víspera del equinoccio de primavera, cuando conoce a Nu y Lóriga, dos viajeros con la intención de llevar a cabo la empresa más descabellada posible: atravesar el Valle de las Nieblas. La bruma allí nunca se disipa y durante siglos nadie ha osado traspasarla. Los viajeros dicen seguir las instrucciones de un viejo libro para hallar un sendero que acompaña la ruta de las abejas Morneas a través de la niebla, y así llegar hasta el Árbol de Homa, el primero de los árboles del mundo. Sin pararse a pensarlo dos veces, Lobías acepta su invitación, pero lo que la expedición encuentra al otro lado de las nieblas es tan extraño como terrible: un mundo en guerra donde pueblos enteros huyen de un ejército que llega desde tierras lejanas y avanza, devastándolo todo.
Nuestro protagonista es Lobías Rumin, un muchacho solitario,
sin más propósitos en la vida que repartir leche cada mañana para ganarse el
sustento. Desde pequeño, siempre le han marginado por culpa de una historia que
jura que le sucedió de verdad, su única familia apenas le dirige la palabra, la
chica que le gusta no le hace ni caso… en resumen, no pertenece a ningún sitio
ni tiene a nadie que se preocupe por él. Quizá por este motivo, al sentirse por
primera vez valorado y útil, no duda ni un instante en aceptar acompañar
primero a los extraños viajeros y después seguir las palabras de esa extraña
chica que se cruza en su camino. Lobías descubrirá que es mucho más de lo que
siempre le habían hecho creer, más valiente, más listo y mucho más especial.
A los demás personajes apenas tenemos tiempo de conocerlos a
fondo todavía, pero es evidente que todos tiene sus propios motivos para
realizar este viaje. Incluso estoy segura de que Lobías esconde aún muchas
cosas en su interior para mostrar.
Este primer tomo de El país de la niebla me ha parecido
muy introductorio, un acercamiento que nos sitúa en el misterioso, complejo y
oscuro mundo que ha creado Jorge Galán. Un
mundo, por cierto, rico en historias y leyendas. Y es que si tuviera que
definir en pocas palabras La ruta de las abejas, lo haría como
«una historia tejida con historias».
El hilo conductor es el viaje del protagonista y sus
compañeros hacia el Árbol de Homa, durante el que vamos visitando distintos
lugares y conociendo a sus habitantes. Pero, además, alrededor de ese hilo se
van enredando un montón de historias antiguas, leyendas y viejas supersticiones
sobre las que se sostiene el mundo que los personajes van recorriendo.
Pues pinta bien, pero ahora mismo con tanto pendiente, le va a tocar esperar bastante.
ResponderEliminarBesotes!!!