Emmett Atwater pensó que participar en el juego de Babel sería algo fácil: conseguir los puntos, ganar la recompensa y regresar a casa. Pero no tardó mucho en descubrir que el concurso organizado por BaBel estaba lleno de promesas rotas, y cada una de ellas más oscura y maligna que la anterior.
Ahora Emmett y el resto de los supervivientes de las naves espaciales Génesis deben reorganizarse y forjar su propio camino en un mundo nuevo. Su misión es simple: extraer Nyxia, el material más valioso del universo, y aprender a convivir con la población nativa.
Pero Emmett y sus compañeros se dan cuenta enseguida de que están atrapados entre dos fuerzas poderosas en conflicto, Babel y los adamitas. ¿Podrá el equipo de Génesis salir de Edén con vida antes de que sea demasiado tarde?
Una vez que
la travesía hacia Edén ha finalizado, los miembros de la tripulación que
consiguieron su plaza en la competición organizada por Babel, por fin, han
puesto los pies sobre el planeta prometido. Su misión allí es excavar las minas
para obtener Nyxia y enviarla a los almacenes de Babel. O eso es lo que
pensaban, al menos, porque las cosas enseguida se van a complicar bastante. Ya
en el primer libro de La tríada de Nyxia pudimos darnos
cuenta de que Babel escondía secretos muy turbios, pero eso no fue nada… porque
todavía guardaban muchas sorpresas desagradables más. Y me temo que ni siquiera
ahora hemos terminado de descubrirlas todas.
En Nyxia
liberada nos encontraremos con nuevos objetivos (bastante más
trascendentales que el de extraer un mineral), conoceremos nuevos personajes y,
sobre todo, exploraremos nuevos escenarios. Sin duda, esto último es lo que más
peso tiene en este libro. Casi, casi, se podría decir que es una especie de
guía de viaje detallada por el planeta que nos habían presentado como Edén. Se
nota que Scott Reintgen trabajó duro
en el worldbuilding de su historia y
quería mostrárnoslo en todo su esplendor. Junto con la tripulación del Génesis,
recorremos el planeta e iremos aprendiendo sobre su geografía, su flora y
fauna, su organización social, su modelo político, sus habitantes y el interés que todo ello suscita en Babel.
Sí que es
cierto que esto, para mí, merma un poco el ritmo de la trama. Así como en el
primer tomo estaban pasando cosas todo el tiempo, en esta ocasión, la acción se
concentra casi por completo en la última parte de la novela, por lo que casi
parece un libro de transición hacia el tercero, que será el desenlace y que
promete muchas emociones, a juzgar por cómo termina este.
De nuevo,
casi todos los capítulos están contados por Emmet, aunque también hay alguno
por ahí suelto contado por otro personaje. Este tipo de narración es una de las
cosas que más me gustan de esta saga, porque vamos descubriéndolo todo a la vez
que el protagonista, que está casi tan perdido como el propio lector.
Además, en
Nyxia liberada conoceremos más a fondo a los personajes, incluso a los que en
la primera parte se mantuvieron más al margen. Me ha encantado Morning, es mi
preferida, sin lugar a duda. Es una chica fuerte, que no tiene miedo a tomar el
mando, a reclamar su puesto como capitana porque sabe que es la mejor
cualificada para esa actividad, a tomar la iniciativa y a arriesgarse, aunque
nunca deja de lado lo que siente por dentro.
Reconozco
que este segundo tomo no me ha gustado tanto como el primero, pero es que Nyxia me fascinó por completo, así que
era muy complicado mantener el mismo nivel. Ambos libros son muy distintos uno
del otro, por el ritmo y por el tipo de trama, además de lo obvio del cambio de
escenario, pero deja la puerta abierta a sorprendernos de nuevo en el desenlace
de la trilogía, así que habrá que esperar a ver cómo salimos de este follón en
el que nos hemos metido con Nyxia liberada.
¡Hola! =)
ResponderEliminarTengo la saga pendiente, gracias por la reseña ^^
Besos :P
No es una saga que me llame mucho, así que esta vez lo dejo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!