“En la nave del encanto” es una road movie, de índole tanto física como espiritual -incluso pirata- en la que Pedro Alonso y su equipo se embarcan en un viaje a través de vías meditativas, acercándose al mundo del chamanismo. Dibujando un ocho por los márgenes de la geografía mexicana, la travesía les llevará al encuentro de maestros medicina tradicionales con los que compartir una particular mirada sobre la vida de naturaleza panteísta, pero también sus protocolos de sanación y sus rituales de visión, en los que participan durante el rodaje. Un viaje que trata de mostrar un camino de crecimiento y de riqueza que, más allá de prejuicios occidentales, ha acompañado con su mirada mitológica al hombre de todas las culturas desde la noche de los tiempos.
Ante los quebraderos de cabeza que me ha dado la endometriosis desde hace 12 años y sus dificultades, opté por explorar soluciones naturales tras saltar de pastilla en pastilla. Lo que la medicina natural ha conseguido, así como el ejercicio físico leve, ha sido increíble. Así mismo, convivo con la ansiedad desde hace cinco años y tras lo vivido con la endometriosis no quise tomar ninguna pastilla y he buscado otros caminos distintos. Ha sido un viaje complicado y difícil, pero he encontrado ese punto de escucha activa entre mi mente y cuerpo, que me ha cambiado la vida.
El año pasado casi muero por una reacción grave a un medicamento al que nunca había tenido alergia y esto me puso cara a cara con la muerte y me puso frente al espejo de la vida.
Esta experiencia me llevó a buscar formas distintas para mitigar dolores u otras cosas en la naturaleza.
Ver el documental de Pedro Alonso, Enrique Baró Ubach y toda su tripulación hizo que recordase una vivencia en Perú.
Aunque no participé, la oportunidad de estar presente en una ceremonia de ayahuasca en Perú (selva) me dejó una profunda impresión, llena de sensaciones y emociones que aún recuerdo.
¿Por qué cuento esto? El documental ha sido como una semilla que se ha quedado en mi mente, rumiando durante días, y me ha hecho reflexionar acerca de las muchas vivencias y como cada uno de los protagonistas del documental las asimilan.
¿Qué habría hecho yo? ¿Soy tan valiente como ellos/as?
En la nave del encanto la narración fluye como un río que te guía suavemente por la voz hipnótica de Pedro y que te invita a acompañarle en un viaje fascinante por muchos lugares.
México, con su alma, historias y cultura ancestral, es el verdadero protagonista de esta mágica historia.
Un personaje principal con mucho que contar, mostrarnos y enseñarnos.
164 minutos que pude ver en el Rizoma Festival y que me supo a menos, ya que me quedé con ganas de conocer otras personas inspiradoras del chamanismo o que tuviesen vínculos con él.
En la primera parte o primer viaje hubo varios momentos en los que la tensión se cortaba con un cuchillo y me sentí pequeña en la butaca, pues no pensé que aceptarían realizar el ritual, pero Pedro hace un discurso conmovedor con el corazón en la mano.
Es un documental brutalmente honesto y que habla sin tapujos sobre algunas cosas que algunas personas no entienden o no quieren entender.
La última parte del viaje me pareció un punto y final muy bello y enternecedor a todo lo que han vivido estos argonautas.
Sara Marcé Vuelvas, Julia Guizar García, Jorge Gustavo García, Nicolás López Vázquez, Óscar López, María Guadalupe Olivares Larraguibel, Gabriel Carrera García, Pablo Medrano Bayona, Silvia G. Martín, Francisco Guizar, David Cortés Domínguez, Nancy Ruth Islas Trejo con su autenticidad nos ayudan a entender la vida, la religión, nuestras raíces, la naturaleza, etc. Los diálogos que tienen, sus dudas, su salida del caparazón nos invitarán a cuestionarnos y pensar acerca de nuestro propio camino y nuestra vida.
Me ha encantado la unión tan bonita que han creado en torno a las experiencias, vivencias y este viaje tan extraordinario. Se escuchan y crecen con cada paso que dan.
Las imágenes que nos regala esta producción son delicadas y bonitas. Incluso cuando lo pasas mal, pues se han metido en una bañera con hielo, pero te quedas hipnotizada viendo el hielo y te concentras en la respiración.
Hace unos meses, aprendí a utilizar la respiración como una técnica para relajarme y cambiar mi enfoque mental, así que cuando se habla en la nave del encanto de la respiración en algunos instantes clave, me alegro saber de qué voy por el buen camino.
Me emocioné cuando se habla de la muerte sin tapujos y con todas la letra, pues parece que la palabra muerte o morir conmociona mucho y no se suele decir, pero con el cariño y respeto que se habla de este paso es fundamental para entender muchas cosas.
En la nave del encanto me ha causado tanta impresión que os quiero contar todo, pero no quiero que sepáis muchas cosas, pero que sepáis que es un viaje que os cambiará los esquemas y os abrirá mucho la mente.
Una travesía encantadora, surcando los mares del desconocimiento y conocimiento en compañía de unas personas magnéticas.
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