ENTREVISTA A AMANDA SIWORAE (POR EL MAPA DEL SILENCIO Y DÓNDE ENCONTRARLO)

Soy amante de la naturaleza, las nubes y viajar. Mis grandes influencias son mis sueños, los viajes por el mundo, las culturas Celta y Japonesa, y el entorno natural y urbano que nos rodea.

Estudié Historia del Arte en Salamanca y posteriormente terminé los estudios en Siena, Italia con una beca. Después de ésta experiencia, descubrí que quería seguir formando parte de la estética práctica de mi mundo. Fue entonces, cuando los prados de la Toscana se adueñaron de mis ojos, y continué mis estudios por la rama de la fotografía, donde los años posteriores los pasé viajando y fotografiando el mundo. Durante esos años, también desarrollé mi propio sello personal con mis retratos artísticos. Más tarde, tras vivir un año en Asia, concretamente en Japón, cambió el rumbo de mi carrera profesional hacia el diseño, y tras regresar a España, estudié un máster en Diseño gráfico y retomé la Ilustración que había dejado atrás en el Bachillerato de Artes.

La vida está llena de caminos inesperados, los cuales nos llevan a nuestro propio destino. Y aunque el mío parecía ser muy claro, tuve que atravesar varios puentes, hasta llegar al punto en el que me encuentro ahora mismo. Soy artista polifacética y autodidacta, y abarco varias disciplinas artísticas.

La belleza de la vida y mis experiencias por el mundo, las culturas y la naturaleza que me inspiran para realizar mis creaciones artísticas, son lo que más feliz me hace.

 - En un mundo tan ruidoso y en el que nos cuesta admirar, enamorarnos y cautivarnos por el silencio ¿Cómo ha sido dar forma a tu historia? (El mapa del silencio y dónde encontrarlo)

Digamos que he ido huyendo de las ciudades cada vez más. Actualmente vivo en un entorno rural, el cual me ha ayudado mucho a encontrar esa soledad de la que hablo en mi libro, y que ha sido clave en este punto de mi vida. Lo cual me ha ayudado mucho a hallar la resiliencia y La Paz en mi interior.  La naturaleza me aporta gran parte de lo que necesito para ser feliz a solas conmigo misma. Entonces el resto de cosas que llegan mi vida, son añadidos o complementos, como me gusta  más llamarlos. Los cuales aumentan la felicidad de la que ya dispongo conmigo misma. Todo suma, pues soy un ser completo e independiente. 

- En tus ilustraciones vemos la unión de las culturas celta y japonesa que no se pisan y que en los dibujos viven en armonía y aportan muchos detalles ¿Sabes que detalles destacar de una cultura y de otra? (en cada ilustración)

 Me alegra mucho que tengas esta percepción de ambas culturas bien definidas y que no se pisen como bien dices. Quiere decir que mi cometido se ve de manera clara. Esto es muy importante para mí realmente. Digamos por ejemplo que, el pelo de las mujeres que dibujo está inspirado en los sauces y a su vez, son pelirrojos, como en las culturas celtas. Especialmente la Irlandesa y la Escocesa. Es un color de cabello que me apasiona.

Por otro lado, los matices Japoneses se pueden apreciar en las vestimentas, los rasgos faciales de los personajes y algunos elementos culturales. A nivel de juego visual, los objetos nipones son más variados por lo general. En cuanto a la cultura Celta, trato de representar mayormente la naturaleza. También las vestimentas. Y como complemento a toda su unión, intento envolverlo en un aire  Art Nouveau, ya que soy gran amante del s.XIX, del Romanticismo y de la época de la revolución industrial.

-  En el libro vamos navegando entre diversas isla, diversos lugares y vamos llegando a diversos estados, diversas emociones, sensaciones mediante la poesía ¿Tenías claro de que el libro fluyese por este genero literario? 

En principio la idea del libro surgió por la imagen de la portada. 

 Sí bien es cierto que, hace años quería hacer un proyecto de este  tipo inspirado en los libros de mi autor favorito, Shaun Tan. Puesto que se enfoca principalmente en la ilustración de libros para adultos. Dentro de este género, los diálogos son muy sencillos. Realmente lo que habla en mayor medida son las imágenes, es decir, las ilustraciones. Así que se podría decir que la forma que adopta, es un tanto poética al fin y al cabo. En el libro he introducido un Haiku personal sobre los acantilados, como parte de la cultura Japonesa. 

- Cuando empezaste con la ilustración ¿la estética fue importante o pasó a un segundo plano? (para encontrar tu propia voz). ¿Fue fácil encontrar tu propio estilo o sigues en continuo aprendizaje y revolución?

Realmente llevo toda la vida metida en el mundo del Arte. Pero hace 10 años, cuando terminé mi Erasmus en Italia, quise retomar el mundo del Arte de lleno. Sentía que tenía muchas cosas que contar de otra manera. Ha sido un proceso muy largo de viajes externos e internos. Lo cual ha llevado a ir dando forma a mi propio estilo y la filosofía de vida que quería transmitir. El Arte es un medio al fin y al cabo, a través del cual puedo contar mi experiencia de vida y aprendizajes. 

Y la estética digamos que se fue moldeando con el tiempo, conmigo, con mi propio proceso evolutivo. 

De hecho creo que siempre está en constante cambio y es algo que es mutable a lo largo del tiempo. Me parece lo más interesante como Artistas, de hecho.

- En el mapa del silencio y dónde encontrarlo es un pájaro el que nos guía por todo este viaje. A veces, se ve y en otras ocasiones se esconde entre la naturaleza ¿tenías claro que fuese un pájaro nuestro guía? (o el comienzo de este viaje). 

 Sí, sin duda. El pájaro es un うぐいす “Ugüisu” (pronunciación Española) y es de la especie  (Horornis diphone, de la familia Cettildae) y habita en Japón. Y es mi pájaro favorito, pues posee el canto más precioso del mundo para mí. 

 Sentí que debía ser parte del viaje como guía. Un símbolo de transformación. Una metáfora como medio de viaje que realiza la mujer. Digamos que a veces se transforma en Uguisu para poder ir de un lugar a otro, cuando no usa sus pies para caminar.

-Has viajado y has fotografiado el mundo. Si tu carreta como ilustradora fuese una fotografía ¿Cuál sería? ¿Porqué??

¡Interesante pregunta! Y difícil a la vez…

Digamos que si fuera una fotografía, esta, sería en blanco y negro, a pesar de lo colorida que siento mi vida. O tal vez sería un paisaje desolado de tonos ocres y verdes, con una figura femenina de espaldas muy pequeña en el centro de la imagen. Lejos, mimetizada con el entorno.

Así me siento cuando viajo por el mundo. Cómo lo grande se desarrolla en lo pequeño, y cómo lo pequeño se desarrolla en lo grande.