Serie de 8 episodios sobre la vida de la actriz norteamericana Ava Gardner en la capital de España, pero vista desde la óptica de las personas que estaban al servicio de la legendaria estrella de cine. El glamour de una estrella de Hollywood y la gris España franquista, la libertad absoluta en la cama de Ava frente al analfabetismo sexual de los españoles, el derroche versus la miseria. Ambientada en 1961, "el animal más bello del mundo" tuvo como vecinos de su dúplex en el número 11 de Doctor Arce a Juan Domingo e Isabel Perón, como los tablaos flamencos Villa Rosa y El Corral de la Morería, la coctelería Chicote, las Ventas o el barrio de Las Vistillas. Ana María (Inma Cuesta) encarna a una profesora de la Sección Femenina, "franquista bastante convencida, decentisísima, coja por poliomielitis, virgen y analfabeta sexual", que acaba trabajando como criada de la Gardner junto a Pilar (Anna Castillo), y Julián Villagarán, entre otros. Paco León encarna al chófer de la actriz.
Tengo que decir que si "Arde Madrid" fuese en color no se vería como se hace en blanco y negro, como si estuviésemos viviendo a principios de los años 60. No se vería como la verán los espectadores con sabor a un whisky antiguo o un ron añejo.
Es una serie en la que aunque la protagonista indiscutible sea Ava Gadner y todo gire alrededor de ella, el resto de protagonistas son increíbles y hacen unos papeles, roles o como queráis llamarlos que a veces rozan el esperpento pero son fascinantes y fantásticos.
Me encanta como se van presentando los personajes, como cada situación o cada capítulo se vuelve más rocambolesco que el anterior, como las locuras cobran vida de la mano del actor Paco León y de la voz de la conciencia o la pepito grillo de la serie Inma Cuesta.
En esta serie se han juntado para un único propósito o digamos para una sencilla misión muchos personajes que van y vienen, que entran en escena y salen y sobre todo que divierten al espectador. Sinceramente tiene un guión lleno de diálogos maravillosos, con un pequeño toque divertido para el espectador.
A veces los diálogos son muy directos y en otras ocasiones divagan pero porque en aquella época no se podía hablar abiertamente de todo.
Ver a Debi Mazar en escena es como si Ava Gadner siguiese viva y nosotros estuviésemos viendo la serie por un agujero, como si fuésemos alguien del servicio de la casa.
Me encanta el personaje de Anna Castillo, más de un buen momento lo viviréis con su personaje.
Aunque no me quiero olvidar del personaje de la ama de llaves, cocinera...etc del matrimonio argentino que vive al lado de Ava, cuando salía a escena sin apenas abrir la boca yo ya estaba que no podía parar de reír.
La alta sociedad, el artisteo, el famoseo de los años 60 está perfectamente retratado en Arde Madrid.
También confesaré que es una serie muy arriesgada en algunas escenas y aspectos que para no hacer spoilers no diré, pero personalmente lo transgresor, lo diferente, lo original....siempre me ha gustado.
Además que los episodios son de 30 minutos y el ritmo es tan vertiginoso que en un abrir y cerrar de ojos habréis visto Arde Madrid entera.
He podido ver los cuatro primeros episodios y se que algunos secretos, algunos personajes nos darán alguna sorpresa que otra, pero estoy ansiosa de continuar viendo esta serie en la que los personajes tienen varias texturas, colores, tienen sus claros y sus oscuros...
No quiero tampoco dejar de aplaudir la banda sonora que nos acompaña capítulo a capítulo, es que en Arde Madrid, no se han dejado ningún cabo suelto.
A esta serie le tengo ganas. Me alegra ver que la estás disfrutando.
ResponderEliminarBEsote!!!