El detective de la policía de Chicago Sam Porter investiga el caso de un hombre atropellado, pues los indicios en la escena del crimen apuntan a que se trata de El Cuarto Mono, un asesino en serie que ha estado aterrorizando la ciudad. Su modus operandi consistía en enviar tres cajas blancas a los padres de las víctimas que secuestra y mata: una primera con una oreja, una segunda con los dos ojos, y otra con la lengua; y finalmente dejar abandonado el cuerpo sin vida en algún lugar. El hombre atropellado llevaba una de esas cajas blancas. Se inicia así una frenética carrera contrarreloj para averiguar dónde se encuentra encerrada la próxima víctima.
Una historia inverosímil, genial y con mucho ritmo hasta el final, serían una de mis descripciones o apreciaciones de esta novela aunque también, los personajes son el punto fuerte de el cuarto mono una novela tan asombrosa, como retorcida.
J.D. Barker ha creado una novela oscura, donde la mente retorcida del ser humano puede ser un personaje más, porque es capaz de dejarnos con la boca abierta por los planes que puede maquinar.
También tengo que dar la gracias al traductor de el cuarto mono por hacer que la novela no perdiese la esencia, ni el ritmo.
Es una novela magnifica, donde los personajes también, son otro punto fuerte que se salen de lo común en un libro como este.
Los secretos del pasado que se unen con el presente en una delgada línea sin que, el lector se de cuenta, es otro juego psicológico de los muchos que tenemos dentro estas páginas y con el que el escritor nos ha querido desviar la mirada de lo esencial, de lo relevante, lo que de verdad importa.
Y es que hace tiempo que no me apasionaba tanto un asesino a serie como en este libro, pensaba que, lo tenía todo visto y leído pero, me doy cuenta de que no, de que ha llegado J.D. Barker para hacer cuestionar al lector si "Hannibal Lecter" o el asesino de "Seven" siguen siendo los reyes de su "sector" si se le puede llamar así.
Tanto Sam como Nash pasando por Clair....son grandes personajes. Aunque también es verdad que solo sabemos un poco más de Porter que del resto, no nos importa, simplemente queremos centrarnos en el caso y no en los detalles de los personajes.
Es asombroso que diga que no me importa que el autor, no nos enseñe el resto de vidas personales del resto de personajes, pero en esta ocasión como lectora te importa un pimiento si es guapo, viejo...sin quererlo te da la mano y te introduce en la mente de "El cuarto mono".
Solo puedo dar las gracias al autor porque ha sido una novela que, será muy difícil de igualar y de leer algo con tanta calidad.
Gracias por haber creado un asesino que se sale de lo común y hacernos vibrar con cada paso que da el equipo y con cada hallazgo.