La prometida-Shana Abe

El clan Kincardine, tiempo atrás poderoso, se encuentra sumido en la miseria de la solo podrá salir cuando el heredero del clan despose una doncella guerrera. Cuando al regresar de las cruzadas, Marcus Kincardine descubre que su clan se encuentra totalmente arruinado decide a buscar a la muchacha profetizada para desposarla. Lady Avalon no cree en predicciones, sino en su capacidad para decidir su camino. Marcus tendrá que luchar contra el sombrío destino que aguarda a su gente, y convencer a Lady Avalon de que la pasión que siente por ella es genuina.

 Es un libro que llevaba demasiado tiempo en mi wishlist y una autora a la que deseaba catar desde hace siglos y gracias a san booky lo compre por menos dinero que en cualquier librería de estos lares.
La curiosidad mato al gato y en este caso no ha sido tan distinto.
Ya, con el nombre de la protagonista Avalon veía que Shana nos tenia que traer algo mágico y no me equivoque, una leyenda unida a esta joven y a Marcus nos llevaran desde Inglaterra a Escocia, sin demasiados sobresaltos pero si con unos cuantos misterios.
La pasión se apaga y se enciende por momentos pero no es que no haya ni física ni química entre Marcus y Avalon, es que el paso juega en contra de este escoces de torso cuadrado, y tic tac tic tac el reloj avanza.
Bal, es un secundario de lujo de esos que eclipsan con su parte y sus palabras hasta el mismísimo rey de Inglaterra, con sus consejos y sabiduría he vivido en la novela buenos momentos y no lo tenéis que perder de vista.
En algunas partes es verdad que sentí que flojeaba pero la autora lo compensara con mas misterios a la saca ¿Que paso con Avalon que mira siempre hacia atrás y no hacia delante? ¿Marcus ha heredado algo de su padre? ¿Avalon es una bruja o esta loca? Preguntas que repondréis al leerlo.
Shana, no me ha enamorado del todo pero con la "Ultima Sirena" espero que llegue a cautivarme.

-Llevadlos al interior-dijo Marcus,cortante.

-No.-Lo miro,rodeado por un grupo de sus hombres y la guardia de Malcolm-.Los abriré aquí mismo, mi señor.

-Me siento como si pudiera dormir mil años-dijo al cielo.