Los protagonistas son un escritor y una escritora rondando los 50 años, que mantienen una relación en la que está por ver qué lugar ocupan la admiración, el éxito, el paternalismo o el amor. La obra es una conversación nocturna, apasionante y apasionada, que se tensa y se calma como el pecho de una bestia dormida. Cuando parece que viene el rugido, asoma el suspiro. No es que la relación íntima entre artistas sea, por definición, conflictiva, pero en ocasiones una moderada charla intelectual se convierte en una berrea cuando los sentimientos entran en juego. Y esto se complica todavía más cuando aparece la condición parasitaria de ciertos escritores.
La resistencia dirigida por Israel Elejalde y con texto de Lucia Carballal se puede ver en los Teatros Canal hasta el 17 de febrero.
Mar Sodupe y Francesc Garrido me dejaron sin palabras sinceramente, mantener al espectador en vilo durante toda la función es difícil y ellos lo hacen sin pestañear, además que los diálogos que mantienen son pura magia y maravilla que van de los sarcástico a lo triste pasando por la crítica más que acertada al mundo de la literatura.
Es una obra de teatro llena de sutilezas, delicada como un manuscrito cuando se está terminando pero del que se desconoce el final, es una interrogación constante donde la comunicación entre esta pareja de amantes se diluye lentamente frente al espectador.
Me ha encantado esa fantástica unión entre el teatro y lo audiovisual como juntos forman una pareja perfecta que se entienden y hace que el espectador se quede embobado viendo las imágenes y escuchando la música que tendrán mucho que decir pero nosotros aún no lo sabemos.
A su vez la escenografía tan bien elegida, tan elegante, tan fascinante hacen que el espectador se transporte a ese bar y sea un cliente invisible de ese lugar con sabor al bar de Casablanca pero en el Siglo XXI.
Esta obra de teatro es un libro dentro de otro libro, dos amantes que son escritores que cada uno en su estilo parece tener su propio público pero el personaje al que da vida Mar ha perdido su belleza, tiene dudas, tiene preguntas que no han sido respondidas aún...
Es verdad que hay muchas obras en las que puede ser que vayas perdiendo el hilo o que te sientas perdido, pero en la resistencia, cada minuto que pasa es como una página que has pasado y es como si volvieses adicto a estos dos personajes.
Me he enamorado del tandem que hacen Mar y Francesc realizan un trabajo actoral increíble y lo mejor de todo es la química que tienen entre ellos.
Israel Elejalde ha hecho que todas las preguntas sin respuesta lleguen a buen puerto porque ha cuidado hasta el más mínimo detalle al dirigir esta obra de teatro.
Como ávida lectora que soy si me dan a leer un libro como la resistencia o como el que se menciona en la obra que está escribiendo ella o el que ha escrito él, yo los leería todos y creo que no me durarían ni un solo día.
Cuando voy a ver obras de teatro o espectáculos y algo me gusta, entusiasma o me enamora tanto como la resistencia tardo muy tiempo en saber que decir, solamente espero que os llegue lo feliz que soy al poder haber visto un trabajo tan completo y tan genial.
Es una obra de teatro llena de sutilezas, delicada como un manuscrito cuando se está terminando pero del que se desconoce el final, es una interrogación constante donde la comunicación entre esta pareja de amantes se diluye lentamente frente al espectador.
Me ha encantado esa fantástica unión entre el teatro y lo audiovisual como juntos forman una pareja perfecta que se entienden y hace que el espectador se quede embobado viendo las imágenes y escuchando la música que tendrán mucho que decir pero nosotros aún no lo sabemos.
A su vez la escenografía tan bien elegida, tan elegante, tan fascinante hacen que el espectador se transporte a ese bar y sea un cliente invisible de ese lugar con sabor al bar de Casablanca pero en el Siglo XXI.
Esta obra de teatro es un libro dentro de otro libro, dos amantes que son escritores que cada uno en su estilo parece tener su propio público pero el personaje al que da vida Mar ha perdido su belleza, tiene dudas, tiene preguntas que no han sido respondidas aún...
Es verdad que hay muchas obras en las que puede ser que vayas perdiendo el hilo o que te sientas perdido, pero en la resistencia, cada minuto que pasa es como una página que has pasado y es como si volvieses adicto a estos dos personajes.
Me he enamorado del tandem que hacen Mar y Francesc realizan un trabajo actoral increíble y lo mejor de todo es la química que tienen entre ellos.
Israel Elejalde ha hecho que todas las preguntas sin respuesta lleguen a buen puerto porque ha cuidado hasta el más mínimo detalle al dirigir esta obra de teatro.
Como ávida lectora que soy si me dan a leer un libro como la resistencia o como el que se menciona en la obra que está escribiendo ella o el que ha escrito él, yo los leería todos y creo que no me durarían ni un solo día.
Cuando voy a ver obras de teatro o espectáculos y algo me gusta, entusiasma o me enamora tanto como la resistencia tardo muy tiempo en saber que decir, solamente espero que os llegue lo feliz que soy al poder haber visto un trabajo tan completo y tan genial.
Ojalá hagan gira y pueda verla por aquí!
ResponderEliminarBesotes!!!