El argumento de esta película nos contará la última noche
antes de la entrada y liberación de Paris por los aliados y cuales eran los
planes del ejército alemán antes de rendirse.
El general Dietrich recibe la orden de destruir totalmente
París, pero el cónsul sueco Nordling intenta quemar su último cartucho para
salvar la ciudad, para ello, se presenta ante el general con una carta de la
persona al mando de los aliados, en ella especifican las condiciones de la
rendición de las tropas alemanas.
Dietrich la destruye sin leerla, desde ese momento entre el
general y el cónsul se establece una batalla dialéctica en la que uno argumenta
los motivos por los que tiene que salvar la ciudad y el otro expone los motivos
por los que no puede desobedecer las órdenes que le dieron.
A medida que pasan las horas iremos descubriendo el conflicto
al que se enfrenta el general; por un lado lo que tiene que hacer y los motivos
por los que está obligado, y por, otro lo que realmente querría hacer.
El director Volker Schlöndorff nos contará como fue la última
noche antes de la rendición de París y de los alemanes, y los problemas a los
que se enfrentaron, puesto que el plan era destruir totalmente la ciudad. Nos
irá mostrando como fueron las negociaciones para evitar que se ejecutaran las
órdenes del mando alemán.
Para ello, Volker se basará en datos reales, como las
reuniones entre el general Dietrich von Cholitz y el cónsul de Suecia Raoul
Nordling, pero lo que no se sabe es ni lo que hablaron ni si París se salvó
gracias a la intercesión de Nordling.
A pesar de que casi toda la acción transcurre en la
habitación del general, la película no se hace nada pesada, todo lo contrario,
es muy dinámica, los diálogos están muy bien construidos. No sé si la obra
teatral dista mucho de la adaptación cinematográfica, pero lo que sí puedo
decir es que la película no solo es interesante, además, consigue que te pongas
en la piel de los personajes, al principio empatizas con el cónsul y sus
esfuerzos por salvar una joya, algo que si se destruyera sería una desgracia,
pero luego, vas entendiendo al general alemán, comprendes que está en una
posición en la que nadie querría estar.
Los dos actores, Niels Arestrup y André Dussolier que
interpretan al general y al diplomático bordan sus papeles a la perfección.
Diplomacia no solo es una película histórica de la de que
disfrutar, además, cuenta con unas interpretaciones soberbias.
- ESTRENO EL 14 DE NOVIEMBRE-
-Agradecimientos a la distribuidora
Tal vez es porque me llama la atención lo relacionado con los militares y varios personajes que he creado están relacionados con ellos, pero me encantan los uniformes usados en la película. Son exactamente el tipo que estaba buscando.
ResponderEliminarDejando eso de lado, es curioso que una película que sea basada en una obra teatral haya resultado tan bien como dices. Normalmente no funcionan.
Gracias por la reseña de la película!
Pues no me sonaba. Y qué buena pinta tiene. Tendré que verla.
ResponderEliminarBesotes!!!
Lo historico me encanta, asi que claro que quiero verla!
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